Por fin el viernes
llegó. Eran las 08.30 am y me dirigía hacia la floristería que estaba a dos
cuadras de mi apartamento. Quería comprar algunas flores para Emilia. Manejé en
mi coche hacia ella. Luego empezaría el viaje hacia Londres. Al llegar a la floristería seleccioné unas
azucenas color rosas. Estas eran sus favoritas, pues les encantan por el aroma
dulce y sutil que emanaban de ellas. A mí también me fascinaban. Por días había
estado esperando este día. Viernes era mi día libre en el trabajo, así que iba
a pasarme el día con ella. Me intrigaba saber cómo siguia la guerra entre
Selonia and Maggoc y el motivo por el cual se peleaban. ¿Que había iniciado la
guerra? Me preguntaba a mi misma. También tenía un interés particular en saber
si aún esos entes espirituales aun le molestaban durante la noche. Pero mi
interés primordial radica en saber cuál fue el motivo principal por el cual se
había casado con Marcos. Tenía sospechas e ideas rondándome la cabeza. ¿Habría
sido su boda y pacto espiritual? Quería saber más sobre el tema, sus visiones y
su supuesta guerra espiritual contra Senojoc. Quizás esta vez logre convencerla
de que nos mudemos juntas, pues yo estaba dispuesta a mudarme para Londres.
Esto le serviría de bien, pero sabía que Emilia no aceptaría mi propuesta por
temor a no interferir en mi vida privada. Al entrar en la ciudad, pude notar
que esta parecía un poco más limpia. Pude notar algunas personas vestidas en
uniforme amarillos, limpiar todo a su paso. Sentía alegría a ver esto, pues
para mí fue una señal de que quizás la guerra terminaría pronto. Al llegar a su
apartamento, abrí la puerta como de costumbre. Ella me esperaba en la cocina.
Pues tenía afuera del refrigerador un trozo grande de res, el cual íbamos a
cocinar para el almuerzo. Ya eran las 11am de la mañana.
Se tomaría dos horas para cocinar la carne en el horno. Ambas tomamos un
pelador de vegetales y nos sentamos alrededor de la mesa a pelar las papas y zanahorias.
En verdad ella es una buena cocinera, pues tenia un gusto exquisito para preparar
los platos mas deliciosos que se le pudieran ocurrir. Yo en cambio no puedo decir lo mismo sobre mí.
Mientras pelábamos los vegetales, nos tomamos una taza de café. Le pregunté cómo
se ha sentido en los últimos días. Ella me dijo que bien. Parecía serena. Llevaba
su pelo liso, colgando en ambos lados de su rostro, cayéndole justamente en los
hombros. Me había dicho que se había
planchado el pelo esta mañana. En verdad le caía bien. Como siempre vestía un
mini vestido rojo oscuro, con diseños bordados en blanco y rosa a lo largo de
las mangas, terminando exactamente en la muñeca. El vestido un poco amplio
hacia que no se le marcara su silueta completamente. Este le llegaba más arriba
de la rodilla. Su figura esbelta hacia que todo le luzca bien. A veces sentía
envidia de su belleza física. Aunque nunca se le he dicho, pues no luciría
bien. Pusimos la carne y los vegetales
al horno para hornear y nos dirigimos a la sala. El televisor estaba encendido.
Estaban pasando las noticias y una alerta se había creado para Essex y se les pedía
a todos los moradores quedarse en su casa y no salir de ella, pues, Rusia habia
empezado el bombardeo otra vez. A los habitantes de Londres también se les
daban las mismas instrucciones. En cuestión de minutos podían escuchar la
sirena de guerra sonar. Miré hacia la calle principal a través de la ventana.
Las gentes caminaban apresuradas, otros corrían. Levante mis ojos hacia el
edificio Bel, en este una pantalla gigante avisaba a todos a regresar a sus
hogares de inmediato. Esto será un caos, me dije a mi misma. Sentí alivio de
que no me encontraba en Essex en ese instante. Me sentí más segura al estar al
lado de Emilia. Sabía que ambas nos protegeríamos la una a la otra. Emilia apago
el Televisor y murmuró cuando dejaran estas dos naciones de pelearse entre sí,
y empezó a culpar a Senojoc de nublar la mente de la mente y como resultado,
teniamos la guerra. Todo lo que estaba pasando en la tierra, de acuerdo a ella,
no son más que las señales que están escritas en el libro sagrado de Senojoc. A
él le debíamos el caos. Pero, según ella, la esperanza del regreso del Rey
Ardoval I salvaría al mundo de la perdición en que se encuentra. Yo le miraba incrédula,
como siempre. No fuera que que le creyera sus historias, pero más bien todo
radicaba, en que yo crecí siendo agnóstica, porque eso fue lo que aprendí de
mis padres. Talvez ese fue el motive por el cual Emilia siempre fue muy
cautelosa al no hablarme sobre religión. Esto no implicaba que ella no haya
tratado. Pero si ha tomado desde nuestra niñez gran cautela y cuidado al referirse
al tema conmigo.
Luego
de terminar de culpar a Senojoc de todo lo malo que está pasando en la tierra,
me pregunto si había traido conmigo suficiente papeles o bolígrafos o si estaba
dispuesta a escribir otra vez sus historias. Yo muy emocionada le dije que sí. Dudosamente,
se sento en el sofá en la posición Buda. Me confeso con penas en su rostro que
no sabía por dónde empezar, pues todavía habia tantas cosas más de las cuales
escribir. Yo le expliqué que debíamos de seguir un orden en sus historias, y el
lector querrá saber que inicio la guerra
entre estos dos reinos y como terminó. Abrí mi bolso y tomé mis papeles y bolígrafos.
Ella estaba lista para empezar. Me dijo:
La
voz dice que, en el año 1878, el rey de Maggoc, Eduardo II había desplomado
cinco bombas atómicas in diferentes ciudades de Selonia. ¿Los motivos? El rey
de Magoc, temía que Selonia se estaba desarrollando rápidamente. Sus habitantes
ya llegaban a los sesenta millones. Esto ponía en peligro el futuro de Maggoc
como reino único en poder, avances científicos y en multitud. El segundo motivo siendo que Los Selonian habían
en varias ocasiones, revelados en contra de su reino. Ellos querían ser una nación
libre e independiente. La tasa de muerte registrada en el reino de Selonia, alcanzaba
un millón de gente en todo el reino. EL rey de Maggoc pensaba que de este modo
Selonia no representaría una amenaza hacia su reino.
El
reino de Magoc alcanzaba una población de cien millones de habitantes. Los
Magocenses son gente de piel verde clara, muy radiante. La estatura normal para
hombre es 6.2”. Las mujeres también son altas. Su estatura alcanza 5.9”. Los
hombres llevan el pelo a los hombros. Ambos sexos se vanaglorian de cuanta
belleza los dioses le habían dado. Las mujeres llevan pelo tricolor, y suelen
llevarlo a lo largo de las caderas. El color de sus pelos se asemeja a los
reflejos en el cabello que aquí las mujeres en la tierra se hacen en el salón.
Pero el color del pelo de estas mujeres Maggocenses
es más intenso. El verde y el rojo eran colores
abundantes y frecuentemente usados pro las mujeres en sus cabelleras. Su nariz
perfilada, labios gruesos como las africanas. Siempre llevan las unas largas,
pues no hacen ningún aseo en las casas. Para eso tienen a las mujeres de
Selonia. Los hombres fuertes y musculosos por lo natural. Sus cuerpos asemejan
a los pesistas. Se sentían grandioso, lo mejor en todo. Arrogancia gobernaban
en sus corazones. Ellos nunca hablaban o buscaban amistad con otros reinos.
Solo le dirigían la palabra a otra gente de otras nacionalidades para darle órdenes.
Especialmente a los Selonian, los cuales usaban como esclavos. No les
respectaban y les hacían hacer labores pesadas, solo por el hecho de ser
Selonian.
Los
Selonian, en cambio, son todo lo apuesto. Son de estatura media. La estatura
normal de un hombre de Selonia es 5.2”. Son
delgados. Llevan el pelo rasurado por órdenes de Maggoc. Pues el rey de Maggoc,
Eduardo II, pensaba que los dioses no le dieron belleza física alguna, ¿entonces
por qué no también rasurarles la cabeza y así ayudar a los dioses en sus
labores? Una orden se efectuó en el 1789, en la cual se les ordenaban a los
Selonians que se rasuraran la cabeza o que se enfrente a la furia del rey
Eduardo II. Su orden fue obedecida, pues lo Selonian no tenía otro remedio que
obedecer. Las mujeres por similar eran
delgadas. De pelo corto, su belleza física no se asemejaba a la belleza física
de sus agresores. Ambos mujeres y hombres en Selonian parecen ser creados ambos
a la misma estatura. Pero en lo espiritual, los Selonian eran gentes amables y
apacibles, siempre se llevaban bien con las otras naciones.
Pero
el tiempo trascurrió. Centenares de años pasaron
y los Selonian crecieron en poder. Su población aumento grandemente y su corazón
creció en coraje y odio por los malos tiempos que han pasado. Maggoc con el
tiempo dejo de censar a Selonia. Ellos creían que los Selonian de ningún modo avanzarían
a tal grado que ellos representarían una amenaza. En todo el sentido de la palabra,
lo consideran inútiles. Todo un desperdicio. Los Dioses no estarían a su lado.
Los Maggocenses se creían invencibles
Pero
al cabo de cinco mil años su población alcanzo sobrepasar los 100 mil
millones que Magoc una vez tenia. Los Selonian apezar de la esclavitud a la
sometida, crecieron en poder. Ellos inventaron el Zapien aéreo. Un avión de
combate, que vuela a 7500 millas por hora. Este fue inventado por una organización
nocturna que estaba cansada de ser sometidos a la ley de Maggoc. El gobierno
muy ha escondida le daba suporte económico a esta organización llamada Trance.
La organización está formada por científicos, physis, mecánicos y filósofos. ¿Su
único objetivo? Crear almas de batallas, ser los primeros en gobernar el cielo
y crear una formula en la cual pudieran reproducirse rápidamente e igualar de algún
modo en el futuro a la población de sus enemigos; de este modo, así se librarían
del poder abusivo de Mago. Esta organización
tenía su base en lo profundo del desierto, área que el gobierno de Maggoc y su
rey no podían alcanzar o sospechar que existiera. Al pasar los cinco mil años sus
objetivos han sido logrados. En su base crearon la fórmula para poder
reproducirse tanto en lo canal como también en el mundo mecánico y acerico. Han
creados copias de sí mismos, clones como nosotros los llamamos. En el desierto
bajo tierra, habían creados un nuevo mundo subterráneo. Este se extendía por al
menos mil millas cuadradas. En este mundo yacían en tubos clones de seres vivos,
entrenados a para un combate mortal. Ellos también han creado su propio sistema
para controlarlos e ensenarles todo lo que debían saber. Por fin habían visto
la luz en la penumbra al final del arduo camino.
A los Selonian no se les permitía tener más
de un niño cada cuatro años. algunos esperan ansioso que esos cuatros años
pasaran, pero en su mayoría, los demás no mostraban interés en ese día. Pues en
su mayoría, ellos no querían traer al mundo a alguien, que solo vivirá bajo
esclavitud, al mando de un enemigo cruel y sin piedad. Me imagino que ya
estaban cansados de vivir. Yo misma puedo simpatizar con ellos. Los pobres han
pasados por arduos y difíciles años bajo el mando de Maggog.
Han creados millones de almas minitivas,
en formas de estrella de mar. Ellas vuelan en el aire and pueden disparar al
enemigo una aguja que contiene un veneno mortal. Estas almas han sido
computaridas para reconocer y hacer diferencia entre u Maggocense y un Selonian
al analizar sus rasgos físicos. Han creados bombas atómicas y muchas clases de
almas de fuego. Ahora ellos luchan por una vida mejor, fuera de los abusos de
sus agresores.
Al
transcurrir los cinco mil años, Maggoc todavía es el reino más poderoso. Ellos
deciden la tasa de nacimiento de otros países. Ellos también deciden el valor
del peso monetaria de cada nación. Su población llega a los ciento setenta
millones. Sus avances científicos también han tomado al mundo oriente por
sorpresa. Han creados aviones de combate que viajan a 5000 millas por horas. Su
medicina también ha avanzado. Crearon una fórmula que permitía a la mujer tener
dos o tres hijos al mismo tiempo. Se vanaglorian de que nadie más ha podido
avanzar como ellos.
Por
el otro lado, por fin Selonia ha logrados sus objetivos. Planearon hasta el último
detalle como deshacerse del rey de Maggoc. Ahora se sienten seguro de que pondrán
por fin ser libres. En el mes de abril, el día 24 del año
684
8, por fin pusieron a cabo su plan. Este día, como cada año, los Magocenses, celebraran el ‘Día de los Dioses’, en honor a los dioses que lo han creado fuertes, inteligentes y todo venerados”. Es todo un evento fenomenal. Hacen fiestas en las calles. Las calles son decoradas con flores artificiales, imagen de los dioses que ellos adoran, cintas y canastas de frutas y vegetales artificiales cuelgan de los postes de la farola en las calles o poste puestos específicamente para ese objectivo. Celebran su prosperidad. Las afueras de las casas son adornadas con banderas y figuras de los dioses que ellos adoran. La gente baila en grupos, levantan sus copas seguras que nadie va a interferir con fiestas, pues nadie tiene el poder. Los alimentos se prepararn tres días antes, pues asi nadie perdería su tiempo en el dia de las fiestas cocinandos. O lo compraban en los supermercados listo para ser abiertos en el momento oportuno. Esto no implica que cada familia fuera de compra, sino mas bien que un grupo seleccionado de cada comité de la comunidad se encargaba de estos arreglos. Los miembros de la comunidad pagaban una quota para esto. Los esclavos Selonian se encargaban entonces, de abrir los paquetes en los días de las fiestas y adornar las mesas. Ellos también les servirían a sus amos.
A
los soldados que vivían en Maggoc se les brinda una fiesta su puesto en la
marina o en tierra en su cuartel; por si acaso alguien se les ocurría molestar
sus fiestas, ellos estarían listos para intervenir
y protegerlos. A la policía se les entreno en cómo actuar en caso de molestias.
A los saldados de puestos en otras naciones, le les traía en este día especial.
Y les entrenaba para estar listos para cualquier acto de terrorismo. En las
noticias se anunciaban cuantos soldados habían regresado al país para que las
fiestas se llevaran a su cabo muy felices.
La
fiesta duraba dos dias. Empezaba en la mañana con el desayuno. Luego a las 3pm
se hacía un receso para que cada quien pudiera ir a su casa y cambiarse de
vestuario. Llevan vestidos lustrosos, de
telas finas y joyas de alta calidad. Todos parecían felices. El baile se podía
apreciar en todas las calles. Risas, historias y anécdotas por doquier. Todos
celebran seguros de que nadie podrá interferir con sus fiestas.
Pero
ellos enajeno de lo que se venia sobre encima, con fuerzas pugnantes y rencor
de millares de años. Selonia muy astutamente, esperó hasta las 8.00pm para
remeter con toda su fuerza. Cubrió el cielo de la ciudad principal, Alogore,
con sus aviones y estrellas voladoras. Parecía como si el cielo estuviera lleno
con pájaros. La multitud comentaban de cuan seguro se sentían. Miraban hacia el
cielo, y levantando sus manos con la sonrisa amplia y plena, saludan a las
fuerzas áreas que sus ojos odian divisar. Ignoraban que era el enemigo que le observaba
desde arriba. Mientras los aviones de combates se paseaban de un lugar a otro observándoles
desde arriba, los Maggocenses elevaban sus manos hacia arriba, encantados de
cuanto poder les protegía. Pero lamentablemente, no era su ejército en el aire observándole,
sino más bien el enemigo...Y.… el ataque comenzó…y.… esta es la guerra he
estado viendo ultimamente. Todos se están matando unos a otros. Unos procuran
su libertad mientras otros quieren reinar y hacer pedazos la vida de los demás.
-Emilia
hizo un silencio, pareció estar atormentada por lo que narraba. Tomo su taza de
café y miró hacia el suelo. Yo espere en ella para seguir escribiendo. Ella miro
la distancia. Yo respecté su silencio por unos minutos y al cabo de estos le pregunté:
¿has vuelto a tener más visiones sobre cómo sigue la guerra, Emilia? Y esa voz
que te habla y te cuenta... sabes la voz masculina, ¿quién es? Pero Emilia dijo
que sentía hambre y era hora de comer. El almuerzo debía de estar listo, pues
han pasado más de dos horas. Fuimos a la cocina y me senté en el comedor. Deje
que ella chequeara los alimentos y me sirva cuando esté lista. La vi pensativa
como si estuviera perdida en la distancia. Sabía que tenía mucho en su mente de
que preocuparse. El almuerzo olía rico, la carne estaba perfectamente dorada y
los vegetales lucían suaves desde donde estaba. Ella repartió el almuerzo en
dos platos. Nos sentamos a comer. Mientras comíamos, Emilia me propone que manejemos
al Eppin Forest, ella tiene algo que ensenarme. Así que luego de armozar fuimos
a la sala y encendimos el televisor. Queríamos ver la noticia de como seguían los
bombardeos. Un paro en los bombardeos se había hecho ora vez. Pues ambos
gobiernos habían otra vez hecho una tregua, pero esta vez por un mes. Esperamos
dos horas más antes de salir. Ya eran las 17.00 horas y el sol aún estaba
fuerte. Pasarían unas cuatro horas más antes de anochezca, así que nos pusimos
en marcha hacia el bosque, el cual estaba más o menos quince minutos del
apartamento. Yo no sentí ningún miedo, pues le confiaba ciegamente. Así que
partimos hacia allá. Cuando llegamos, parqueamos bajo un árbol en el parqueo.
Ella quería tomar un poco de aire fresco, así que caminamos. Ella me dijo:
- ¿Creerías si te digo que todos, los humanos
y no humanos todos vivimos en el mismo planeta? ¿Que el hombre se ha gastado
billones y billones de dólares tratando de encontrar a otra forma de vida
pensante? ¿Otra raza que racione como nosotros? Que investigaciones se han
hechos en otros planetas, el hombre ha ido a la luna y de vuelta otra vez,
¿todo en vano? Pues si han buscado en el lugar equivocado. Toda forma de vida está
ubicada aquí en la tierra, excepto por la vida en los cielos. Aquí en la tierra
hay 13 niveles la voz me ha dicho. En el nivel 1, estamos nosotros, en el nivel
dos está el Oriente. No conozco los demás niveles pues no se ha mostrado. Hoy
tu vendrá contigo al nivel dos. Te lo mostraré. No temas, estaremos segura, al
menos eso es lo que dice la voz. Solo iremos por unos minutos. Yo sé que tú
tienes tus dudas sobre mis vivencias y que quizás te has formulado la idea, de
que mis psicólogos están en lo cierto en sus diagnósticos. Hoy por que la voz
me lo permite, te mostrare el nivel dos.
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